6 señales de alerta acerca de la salud de tu hijo (FOTOS)
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Erupciones
Erupciones moradas, dolorosas o unidas a vómito y fiebre son motivo para acudir a un especialista. También debes prestar atención a aquellas que no se van en un par de días. Por supuesto, las erupciones son comunes y en la mayoría de los casos no son motivo de preocupación. No obstante, cualquier cosa que produzca una reacción mayor por parte de tu pequeño requiere de atención médica inmediata. Si tu hijo tiene dificultades para respirar o tragar, y sus labios se han hinchado, llama al 911 inmediatamente. Puede tratarse de una reacción anafilaptica.
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Hinchazón en articulaciones
Es común que los niños tengan dolores en piernas y brazos, especialmente cuando empiezan a hacer deporte. Pero es importante que prestes especial atención a hinchazones en las zonas donde se encuentran las articulaciones y tendones. No son normales y deberás ir al médico de urgencias. Si al dolor en las articulaciones, se le suma fiebre, rojez o dolor ve al doctor inmediatamente para asegurarte de que no se trata de artritis reumatoide juvenil u otra dolencia seria.
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Dolor al orinar
Si tu pequeño se queja de que orinar le duele, es posible que se trate de vulvitis, una inflamación de los genitales femeninos causada a menudo por baños de burbujas y jabones ásperos. Es más frecuente en las niñas pequeñas al contar con menores niveles de estrógeno. También podría tratarse de una infección urinaria (UTI, por sus siglas en inglés), una dolencia frecuente en los Estados Unidos. Acude a tu médico cuanto antes para asegurarte.
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Dificultad para leer
Si tu hijo tiene problemas para leer o seguir las clases con normalidad, no tiene por qué ser un problema de capacidades para el estudio o académicas. Puede tratarse de una señal de que tu hijo tiene problemas de visión. Siempre viene bien revisar la vista de tus pequeños cada cierto tiempo.
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Sed constante
Aunque los hijos necesitan ingerir muchos fluidos debido a su alto nivel de actividad, si notas que tu hijo está bebiendo mucho más de lo normal, especialmente durante varios días seguidos, acude rápidamente al médico. Podría tener diabetes. Esto es así porque cuando se padece diabetes se acumula un exceso de azúcar en la sangre y el cuerpo trata de expulsarlo bebiendo y orinando mucho. Es muy importante detectar la diabetes cuanto antes, para empezar a recibir tratamiento.
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Exceso de sueño
Si tu pequeño insiste en tomar más siestas de lo normal o está adormecido, lo más seguro es que no esté durmiendo lo suficiente cuando debe y le falten horas de sueño. Ten en cuenta que los bebés necesitan dormir aproximadamente 14 horas, los toddlers deberían descansar entre 12 y 14, y los niños en el pre-kínder requieren de 11 a 13 horas. Aunque el hecho de que tu hijo tenga exceso de somnolencia no implica necesariamente que tenga ningún problema de salud preocupante, sí que deberías ser capaz de despertarle si lo intentas y el pequeño tendría que poder reaccionar a preguntas o interacciones. Sin embargo, debes ponerte en manos de los especialistas si no puedes levantar a tu bebé para alimentarlo o darle el pecho.
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