La tarea escolar: cómo ayudar a tus hijos

1. No juegues a la sabelotodo. Nadie te está pidiendo que de pronto te conviertas en un oráculo de geografía o matemáticas. En vez de actuar con soberbia, si ves que llegas a un punto donde ya no puedes avanzar, envíale un correo electrónico a la maestra de tu hija transmitiendo dudas, pidiendo aclaraciones u otros recursos. “Evita tener que aprender algo a las apuradas”, aconsejan los expertos. Motivo: tus explicaciones seguramente confundirán más a tu hija y la distraerán de las que ya le haya dado su maestro.

2. Pregúntale al profesor Google. No dudes en acudir al internet y aprovechar la tecnología. Ya verás que allí encontrarás muy buenas herramientas de enseñanza u otros recursos que por lo menos te ayudarán a entender lo básico del tema que busques. Eso sí: no te quedes solamente con esas herramientas porque seguramente no te alcanzarán.

3. Llama a una amiga. Prepara una lista con amigos, conocidos o incluso vecinos que sean profesionales, o que tengan alguna especialidad o experiencia en disciplinas del conocimiento. ¡Incluso tu marido puede ser uno de ellos si alguna vez se destacó en ciencia, historia o matemáticas! Pídeles a tus hijos que también sugieran nombres, que pueden ser desde maestros hasta alumnos brillantes en alguna materia para la que necesiten ayuda o asesoramiento. La experiencia indica que siempre aparecerá alguien que podrá ayudarlos.

¿Pensaste en Facebook, Twitter o alguna otra red social? Allí seguramente también podrás encontrar senderos útiles, sea para recibir indicadores sobre la Constitución o cómo calcular las distancias planetarias.

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