Cómo manejar la náusea matutina en el trabajo cuando estás embarazada

Por: TushBaby Carrier

Traducido por Ana Cristina González I Foto: Getty Images

La náusea es un síntoma clásico del embarazo, y trabajar mientras te sientes mareada no es fácil. Aquí, mamás de la vida real te comparten sus consejos para ayudarte a lidiar con esto.

Faltar por enfermedad

Llamaba seguido para avisar que estaba enferma.

–Helena Ray, Los Ángeles

¡Salud!

Limonadas de cereza de Sonic y muñequeras de Sea-Band

–Cori Lewellen, Jefferson City, Missouri

Tomar el aire fresco

Me ayudaba mucho levantarme periódicamente a caminar o salir fuera a tomar el aire fresco.

–Anastasia Haviza, Fishers, Indiana

Tomar leche

Suena raro, pero beber un vaso grande de leche Hershey’s sabor chololate me ayudaba.

–Mimi Blakley Fisher, Addison, Illinois

Dormir

Le pedí a una colega que me moviera si empezaba a quedarme dormida, pues estaba tomando Phenergan.

–Molly Lynskey, Columbus, Ohio

Cargarme de carbohidratos

Yo tenía galletas saladas guardadas por todas partes. Y ginger ale. ¡No olvides el ginger ale!

–Christy Cox Mayton, Blackstone, Virginia

Comer mentas

Las mentas. Mi mamá juraba su eficacia, ¡y yo también!

–Tracie Jones, Houston

Comer dulces Sour Patch Kids

Una amiga muy sabia me sugirió los Sour Patch Kids.

–Beth Chatham, Glens Falls, NY

Tomar tus medicinas

Yo tomé Zofran y Phenergan y me quedé cuatro meses en casa.

–Stephanie Porter Cutlip, Appomattox, Virginia

Estáte preparada

Yo tenía dos botes de basura.

–Grace Parker, Jacksonville, Florida

Mantente fresca

Yo guardaba un mini ventilador en mi escritorio.

–Jessica Robinson, La Vergne, Tennessee

La hora del té

El té de menta me funcionó.

–Mindy Lopkin, Middletown, Connecticut

Añade calor

Dulces sabor canela y compañeros de trabajo comprensivos

–Kim Welch Payne, Corryton, Tennessee

El agua funciona

Yo me tomaba una taza grande de agua y regresaba a trabajar.

–Sarah Duff Hansel, Cedar Rapids, Iowa

Embolsarlo

¡Lleva contigo en todo momento una bolsa Ziploc de un galón (3.78 litros)!

–Jessica Lipiec, Milford, Michigan

Fruncir la boca

Yo olfateaba limones todo el día.

–Shelly Rosado, Boston

Bocadillos

Yo llevaba conmigo una caja de Frosted Mini-Wheats para asegurarme de tener algo en mi estómago siempre.

–Becky Kretzer Ward, Bainbridge, Ohio

Masticar

Chicle de hierbabuena

–Christy Cox Mayton, Blackstone, Virginia

¡La sopa está lista!

El comedor que quedaba enfrente de mi oficina servía una sopa de fideos con pollo increíble. Esta me asentaba el estómago de inmediato. 

–Carol Yeatts, Ocean View, Virginia

Algo fresco

Yo comía fruta fresca y fría.

–Jonnielle Stagen, Chicago

Los olores

Yo era súper sensible a los olores así que tuve que cambiar de jabón y dejar de usar perfume.

–Jillian Eva Tackett, Kansas City, Missouri

Las nueces

Yo mordisqueaba almendras todo el día.

–Lauralee Olson, Brigham City, Utah

Aplatanarte

Yo me comía un plátano en la mañana y masticaba chicle todo el día.

–Christina Clayton, Maryville, Tennessee

Panecillos en la cama

Me ayudaba comer algo antes de levantarme de la cama, así que yo guardaba los panecillos de la cena en mi mesita de noche.

–Corrinne Lewellen, Jefferson City, Missouri

Vivan las vitaminas

Descubrí que mis vitaminas me daban nauseas, así que empecé a tomarlas antes de acostarme y, ¡puf!, las náuseas matutinas se esfumaron.

–Sonia Zombro Strong, Murray, Utah

Este artículo fue originalmente publicado en Parents.com