5 causas del insomnio durante el embarazo
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Algunas mujeres duermen como bebés durante su embarazo. Otras, por el contrario, tienen más problemas para estar cómodas, y pasan toda la noche moviéndose y cambiando de postura. Así, también puede suceder que dormir sea fácil durante las primeras fases del embarazo pero que se complique en los meses posteriores. A continuación, te damos unos tips para que mejores tus problemas de insomnio:
- Acaba con los fluidos nocturnos. La necesidad frecuente de orinar es uno de los mayores saboteadores del sueño. Muchas mujeres embarazadas se tienen que levantar una, dos, e incluso tres veces cada noche, para miccionar. Puedes reducir los viajes nocturnos al baño bebiendo la mayoría de los fluidos a primera hora del día y evitando beber líquidos después de la cena.
- Mantén el ardor de estómago bajo control. Evita ingerir comidas picantes y con alto contenido graso por la tarde, y come ligero por la noche. Elevar tu cabeza en la cama o utilizar una almohada extra también ayuda.
- Haz ejercicio por la mañana. Llevar a cabo un buen nivel de actividad física puede ayudarte a dormir, aunque hacer ejercicio justo antes de irte a la cama podría mantenerte despierto.
- Prueba a dormir de lado. A partir de la semana 24, no es recomendable dormir boca arriba, con la espalda tocando el colchón. Hacerlo podría impedir la buena circulación de la sangre por lo vasos principales y puede darte náuseas.
- Utiliza cojines para estar más cómoda. Conforme tu estado avanza, el peso del bebé que está creciendo dentro de ti puede hacer una incómoda presión sobre ciertas partes de tu cuerpo. Algunas mujeres encuentran alivio al utilizar almohadas de cuerpo entero, que se venden en catálogos online y tiendas de bebé. Puedes tener una sensación similar en todo tu cuerpo alineando varias almohadas pequeñas.
- Aprende a relajarte. Si el estrés te mantiene despierta, toma un baño o ducha caliente antes de irte a la cama, practica ejercicios de relajación a través de la respiración, o pídele a tu pareja que te haga un masaje.
- Evite el café, té, chocolate (calientes o fríos) y, por supuesto, el alcohol. Si normalmente no tienes la tensión muy baja y considerando que lo normal es que suba durante el embarazo es mejor beber sólo agua.
- Clases de parto. Asistir a clases de parto te ayudará a perder miedos que tengas, conocerás a otras mujeres en tu situación y ¡lo pasarás genial!
La información facilitada en esta página tiene propósitos educativos únicamente. No sustituye, en ningún caso, a información proporcionada por un doctor o especialista médico. No utilices esta información para autodiagnosticarte o tratar problemas médicos o lesiones, sin antes consultarlo con tu doctor. Por favor, consulte con su pediatra cualquier duda relacionada con la salud de su hijo.
Foto: Fuse
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