¿Cómo sé si mi bebé está tomando suficiente leche?

Es probable que otras madres que no amamantaron y le dan fórmula a su bebé, hablen de que él o ella toman determinado número de onzas en cada sesión de alimentación. Pero cuando está amamantando, es imposible ver cuánta leche toma su chiquitín.

Por eso, lo principal es que esté alerta a las señales que da su bebé. Más allá de los horarios, él o ella le dará las claves para indicarle si tiene hambre y si está satisfecho. El promedio para un recién nacido es cada dos horas, pero eso puede variar de un bebé a otro. Por eso, si lo amamantó y al rato indica que quiere más, no lo cuestione. Su estómago es tan pequeñito que necesita de su leche muy seguido. Por lo general, su bebé se alimentará bien (si no hay problemas, como la mala posición del bebé al amamantar), pero en ocasiones, puede que no esté tomando toda la leche que necesita y esto puede causar problemas. Tenga en cuenta lo siguiente para saber si su bebé está alimentándose debidamente:

• Sus senos deben sentirse suaves luego de cada sesión, puesto que el bebé vacía la leche que hay en ellos.
• Su bebé se ve relajado y satisfecho luego de alimentarse.
• Observe cuántas veces orina. Durante los primeros días de vida, cuando recibe el nutritivo calostro (la primera leche, que está llena de anticuerpos e inmunoglobulina que ayudan a proteger al bebé de virus y bacterias y además, a eliminar los deshechos fecales conocidos como meconio), su bebé mojará de uno a dos pañales. Pero cuando le “baja la leche”, su bebé mojará de 6 a 8 pañales de tela o de 5 a 6 desechables.
• Observe cuántas deposiciones (evacuaciones) tiene: durante el primer mes, ensuciará el pañal por lo menos 3 veces al día. Las primeras deposiciones son oscuras, casi negras, pero para el quinto día de nacido se vuelven color mostaza. A medida que crece, puede tener una deposición al día. Pero cada bebé es diferente, así que tenga esto en mente. Lo importante es que haya heces fecales pues indican que está comiendo lo suficiente.
• La mayoría de los bebés pierden entre el 5 y el 9 por ciento de su peso al nacer durante los primeros días, pero lo vuelven a ganar al cabo de un par de semanas. Si su bebé perdió peso y lo recuperó y sigue subiendo de peso, está bien alimentado.